El partido entre Inter de Milán y Urawa Red Diamonds en el Mundial de Clubes fue un duelo lleno de emociones y dramatismo, que tuvo que esperar hasta los últimos minutos para decidirse. El encuentro, que se disputó en Seattle, comenzó con un dominio claro del Inter, que mantenía la posesión del balón y parecía controlarlo todo. Sin embargo, el primer golpe llegó de parte de los japoneses, quienes sorprendieron al Inter con un gol de Watanabe en el minuto 11′. A pesar de los intentos italianos por igualar el marcador, la defensa del Urawa Red estuvo firme, y el Inter se vio frustrado una y otra vez en sus llegadas al área rival.
El equipo de Simone Inzaghi no dejó de buscar el empate, y sus esfuerzos se multiplicaron en la segunda mitad. Lautaro Martínez, líder indiscutible de los italianos, estuvo cerca de lograr el empate con un remate de cabeza al larguero en los primeros minutos del segundo tiempo. A medida que los minutos avanzaban, el Inter se volcó al ataque y creó varias ocasiones, como un disparo de Asllani desde el borde del área que se fue desviado, o un intento de Dimarco que voló por encima del travesaño. Sin embargo, la suerte parecía no estar del lado del club italiano.
El Urawa Red, por su parte, aprovechó cada contragolpe para intentar mantener la ventaja, y aunque tuvieron algunos intentos de ampliar el marcador, el Inter fue quien volvió a sacudir la red. En el minuto 78′, un centro perfecto de Barella permitió que Lautaro Martínez anotara un gol espectacular de chilena, empatando el encuentro y levantando la esperanza de una remontada. Con el marcador igualado, el Inter no cesó en su búsqueda del gol de la victoria.
Inesperadamente y en los últimos minutos del partido, el joven Carboni fue el encargado de sellar la remontada. En el minuto 92′, aprovechó un rebote en el área y anotó el gol de la victoria para el Inter de Milán, asegurando los tres puntos en un vibrante encuentro. A pesar del empuje japonés, el Inter logró mantener la calma y aseguró un triunfo vital de cara a la clasificación del Grupo E del Mundial de Clubes, mostrando carácter y determinación hasta el último segundo.