En un giro inesperado, la aplicación de videos cortos TikTok anunció su regreso a la escena estadounidense después de que el presidente electo Donald Trump decidiera posponer su prohibición, apenas un día antes de asumir la presidencia. Esta medida beneficiará a más de 170 millones de usuarios estadounidenses y a 7 millones de pequeñas empresas que dependen de la plataforma.
Un alivio para los usuarios y las empresas
La noticia fue recibida con alivio por la comunidad de TikTok, que se había visto obligada a suspender sus operaciones el 19 de enero debido a una ley que prohibía su funcionamiento en el país. La empresa había publicado un mensaje de despedida a sus usuarios, informándoles sobre la suspensión temporal de sus servicios.
El origen de la crisis
La crisis se originó en diciembre de 2024, cuando un tribunal de apelaciones estadounidense rechazó la petición de TikTok para revocar una ley que exigía su separación de ByteDance, su matriz china. El gobierno estadounidense había expresado preocupaciones sobre la posibilidad de que la plataforma permitiera al gobierno chino recopilar datos privados y espiar a los usuarios, así como su potencial uso como canal para difundir propaganda oficialista.
Una solución a largo plazo
TikTok ha manifestado su disposición para trabajar con el presidente electo Trump en la búsqueda de una solución a largo plazo que permita la continuidad de sus operaciones en Estados Unidos. La empresa podría considerar la venta de la aplicación a una entidad que no sea considerada adversaria por el gobierno estadounidense.
Un paso hacia la libertad de expresión
La decisión de Trump ha sido calificada por TikTok como «una postura firme a favor de la Primera Enmienda y contra la censura arbitraria». La empresa ha expresado su agradecimiento al presidente electo por proporcionar la claridad necesaria a sus proveedores de servicios, asegurándoles que no enfrentarán sanciones por mantener operativa la plataforma en territorio estadounidense.
