La presidenta Claudia Sheinbaum encabezó la firma del Acuerdo Nacional Maíz-Tortilla, que congrega a productores de grano, molinos harineros, nixtamaleros, tortilleros y distribuidores, con la meta de optimizar la cadena de suministro y contener los precios al consumidor.
Alejandro Habib Nicolás, enlace de la Secretaría de Economía con el sector agroindustrial, explicó que el acuerdo aspira a una baja gradual de hasta un 10 % en el costo de la tortilla a lo largo del sexenio. El plan de acción, que entra en vigor de inmediato, contempla medidas como:
-Fijar precios de referencia para el maíz blanco y la harina,
-Reducir costos logísticos, en especial de transporte y fletes,
-Combatir la informalidad en las tortillerías,
-Fortalecer la seguridad en el traslado del grano,
-Facilitar financiamiento vía FIRA con tasas preferenciales.
“La primera fase busca estabilizar el precio y lograr un recorte cercano al 5 %. Si las condiciones de mercado, climáticas y financieras lo permiten, en tres o cuatro años podríamos aspirar a un 5 % adicional”, detalló Habib tras la firma del convenio.
Como resultado inmediato, el funcionario prevé que en las regiones donde la tortilla se vende actualmente a 20 pesos por kilo, el costo baje a 19.50 pesos. “Es una reducción modesta, pero significativa para el bolsillo de las familias mexicanas”, subrayó.