Un nuevo incendio, denominado «Auto», se registró la noche del lunes en el condado de Ventura, vecino de Los Ángeles, justo en medio de una alerta por fuertes vientos de Santa Ana que complican los esfuerzos de contención. Según el Departamento de Bomberos de California (Cal Fire), el fuego se detectó a las 21:25 horas y, aunque su avance ha sido frenado, en pocas horas consumió 22 hectáreas.
Equipos de emergencia trabajan para extinguir los puntos calientes y aumentar la contención en la zona afectada. Este incidente se suma a los incendios «Palisades» y «Eaton», que han estado activos durante más de una semana en el condado de Los Ángeles. El incendio «Palisades», el más virulento, está contenido en un 17 %, mientras que el «Eaton», en Pasadena y Altadena, ha sido controlado en un 35 %.
El sur de California enfrenta desde el lunes un nuevo periodo de intensos vientos de Santa Ana, que alcanzarán su mayor intensidad este martes por la mañana y prolongarán el riesgo extremo de incendios hasta la tarde del miércoles, según el Servicio Meteorológico Nacional (NWS). Las condiciones secas y los vientos han llevado a emitir advertencias de bandera roja bajo una “situación particularmente peligrosa” (PDS).
Desde el inicio de los incendios el pasado 7 de enero, la región ha sufrido graves pérdidas: 24 personas han fallecido, más de 16,100 hectáreas han sido arrasadas, 7,000 estructuras destruidas, y al menos 150,000 personas han sido evacuadas. Actualmente, 88,000 residentes del condado de Los Ángeles permanecen bajo órdenes de evacuación, según informó el sheriff del condado, Robert Luna.
Los equipos de emergencia continúan trabajando sin descanso para proteger vidas y propiedades en un escenario que sigue siendo crítico debido a las condiciones climáticas adversas.
