Rolly Romero (17-2, 13 KO’s) venció de manera contundente por decisión unánime a un apagado Ryan García (24-2, 20 KO’s) en la pelea estelar celebrada en Times Square, por el título regular de la AMB, con tarjetas de 115-112 en dos ocasiones y 118-109 en la tercera. El regreso del californiano al cuadrilátero dejó más dudas que certezas, evidenciando la falta de ritmo, secuelas de inactividad y una vida extradeportiva que parece haber cobrado factura.
El combate tomó rumbo desde el segundo asalto, cuando García, al intentar tomar la iniciativa, bajó su mano derecha y fue sorprendido por un gancho de izquierda de Romero que lo envió a la lona. Aunque ‘King Ry’ se levantó de inmediato, quedó en modo supervivencia ante un Rolly decidido a terminarlo.
En el quinto round, García mostró destellos de su explosividad con un gancho al rostro de Romero, quien respondió con inteligencia, amarrando a su rival para frenar su ofensiva. El cubano-estadounidense se adaptó rápidamente, dominando la distancia con su jab y controlando el ritmo del combate.
Para el séptimo episodio, ambos se mantuvieron en el centro del ring sin grandes intercambios. Sin embargo, fue en el noveno cuando Romero castigó con solidez el cuerpo de García, obligándolo a retroceder una vez más. La pasividad del californiano contrastaba con la actividad estratégica de su oponente.
Ni siquiera los gritos desde su esquina lograron reanimar a García en el undécimo asalto. Optó por marcar distancia sin lanzar combinaciones, mientras Romero continuaba castigando al cuerpo con su mano derecha. El último round transcurrió sin emociones ni presión por parte de Ryan, sellando una actuación deslucida.