El Departamento del Tesoro de Estados Unidos impuso este lunes sanciones a “Los Chapitos”, una facción del Cártel de Sinaloa liderada por los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, y los designó como Organización Terrorista Global Especialmente Designada, en el marco de una ofensiva contra el narcotráfico transfronterizo impulsada por el presidente Donald Trump.
Mediante un comunicado oficial, el gobierno estadounidense acusó a la célula criminal de encabezar operaciones de producción y tráfico del opioide fentanilo, considerado una de las principales causas de muertes por sobredosis en el país.
Entre los sancionados se encuentran Iván Archivaldo Guzmán Salazar y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, ambos prófugos y señalados como líderes del grupo. Además, se incluyó a Víctor Manuel Barraza Pablos, presunto operador en Mazatlán, y al empresario José Raúl Núñez Ríos, vinculado al lavado de dinero a través de negocios inmobiliarios y hoteleros en Sinaloa.
«Los Chapitos son una facción poderosa e hiperviolenta del Cártel de Sinaloa que lidera el tráfico de fentanilo hacia Estados Unidos», declaró el secretario del Tesoro, Scott Bessent. “Estamos cumpliendo el mandato del presidente Trump de erradicar a los cárteles y salvar vidas”.
Las sanciones implican el congelamiento de cualquier activo que los señalados puedan tener en territorio estadounidense, además de prohibir a ciudadanos o empresas en Estados Unidos realizar transacciones con ellos. Aquellos que colaboren o mantengan vínculos financieros con los individuos sancionados podrían enfrentar medidas similares.
Esta acción se suma a la designación previa del Cártel de Sinaloa y otras organizaciones como grupos terroristas, parte de una estrategia que también incluye endurecimiento de políticas migratorias y deportaciones masivas hacia países latinoamericanos.
