El empresario Carlos Slim, considerado el hombre más rico de México, ha consolidado su participación en el sector energético del país tras invertir más de 2 mil millones de dólares en proyectos de petróleo y gas, convirtiéndose en el principal socio privado de Petróleos Mexicanos (Pemex). Así lo reveló un reportaje de Bloomberg, que analiza el avance estratégico del magnate en esta industria.
Según la publicación, su incursión en el sector ha sido paulatina. Todo comenzó con la compra de acciones en la empresa Talos Energy Inc., participación que eventualmente fue transferida a su filial en México. Posteriormente, en 2023, Slim adquirió dos yacimientos petroleros en una operación valuada en 530 millones de dólares.
Además, el empresario puso en marcha un plan de inversión de mil 200 millones de dólares para desarrollar un yacimiento de gas ubicado en el Golfo de México, reforzando su papel dentro de un rubro históricamente controlado por el Estado.
En declaraciones hechas en febrero pasado, Slim adelantó que busca incrementar la producción en los campos adquiridos, lo cual requerirá la apertura de nuevos pozos y la adquisición de una plataforma adicional. “Esa plataforma la construiríamos nosotros para dentro de unos dos años”, indicó.
De acuerdo con sus estimaciones, se espera una producción de 40 mil barriles diarios en el corto plazo, con posibilidad de duplicarse, dependiendo de las condiciones del mercado. No obstante, reconoció que los proyectos enfrentan importantes desafíos técnicos y elevados costos de operación.